domingo, mayo 16, 2021

Intermedio XX

Sufro una aceleración temporal que me deja con poco tiempo para hacer lo que más me cuesta: escribir. Por ese motivo tengo que contar con la mayor cantidad disponible para poder construir algunas líneas de texto que den cuenta de lo que ocurre de este lado, es decir, donde estoy parado. Lo que sí ha llamado mi atención es la ingobernabilidad individual a nivel mundial que se puede apreciar. Por cualquier cosa nos bajamos de nuestros coches para insultar o reivindicar un derecho que sentimos fue pasado a llevar. En cualquier lugar: llámese fila del super, del transporte público, de alguna oficina, qué sé yo. No quiero hacer valoración alguna sobre aquellas conductas, solo digo que llama mi atención. Algunos encuentran una aproximación a una respuesta en la crisis de salud mundial que estamos viviendo; otros, a la decadencia de una vieja moral; en la explosión tecnológica de la mano de la ciencia; o simplemente para otros es un nuevo estado mental de la humanidad. Quizá son todas las anteriores, constituyéndose cada una en una simple arista.
Eso es, grosso modo, lo que está ocurriendo en mi entorno; y no es poco. No es poco si le sumo lo que ocurre en mi mundo interior, donde ya no escucho la voz de mi madre. Donde hasta hace poco era una onda mecánica explicada muy bien por la física, hoy solo es un recuerdo.