domingo, mayo 25, 2008

Entrevista

Ya sueñas con levantar vuelo ¿Cierto? No me digas que nunca has imaginado como será desplegar esas alas (tus alas) sobre esos alisios por vez primera; que nunca has imaginado tu cuerpo en pleno vuelo ascendente. Ráfaga de viento, haciendo abrir tus ojos al mínimo. Arden tus ojos. Acudan pues, lágrimas a ellos: Aprovecha llorar lo que dejas…

¿Me escuchó, señor?

Perdón… ¿Cuál fue su pregunta?

Le repito: Qué ave le gustaría ser.

4 comentarios:

Anabel Rodríguez dijo...

Usted, ¿soñó, o pensó?.
Esa imagen se me quedó dentro.
Y Ferragus ¿Qué ave desea ser?.
A mi me bastaría cualquiera que volara (no quiero ser un avestrúz),siempre que de cuando en cuando pudiera reflejarse en olas oscuras, que adviertan la profundidad del mar.
Abrazos transatlánticos.

Ferragus dijo...

Un ave en particular me llama la atención, ésta habita a lo largo de la cordillera de los andes y es reconocida dentro del folclore de muchos países americanos: El cóndor
Te he de contar un encuentro maravilloso con una de éstas, durante una ascensión a un cerro ubicado en esta cordillera: Me encontraba a una altura de unos tres mil ochocientos metros aproximadamente; y de las alturas de ese cielo emergió sin darme cuenta un cóndor, me recosté de espalda en un planchón de nieve para observar su imponente figura; debió tener por lo menos unos tres metros de envergadura, me miró detenidamente durante su vuelo, dio tres vueltas a una altura de unos sesenta metros y desapareció: Hermoso.

Un gran saludo, Anab.

Anabel Rodríguez dijo...

Me has dejado sin palabras, con la boca abierta... extasiada, esa es la palabra que buscaba.
Que imagen tan hermosa. Es como si la tuviera delante mía en este momento.
Gracias.

Anónimo dijo...

Esta "Entrevista" (con Dios) me parece de excelencia.
Coincido con tu reconocimiento al Cóndor, impacta su magestuosidad serena y acción certera.
Un saludo cordial desde Sentires